Hace poco tiempo confeccioné un artículo titulado “La Puerta de San Esteban” de la Mezquita-Catedral de Córdoba, calificándola como la puerta hispanomusulmana más antigua.
Hoy lo vamos a hacer sobre la Puerta del Alminar de la misma edificación. Y me vais a perdonar el que no ponga ninguna foto de ella, pero es que no es posible. No os preocupéis de buscarla pues es una puerta que desapareció hace mucho tiempo.
Porque hay tres tipos de puertas en la Mezquita-Catedral de Córdoba. Las que siguen estando ahí y prestan su función como tales, las que han cambiado de función y las que han desaparecido. Y ésta es de las terceras.
Cuando Abderramán III decide ampliar el patio no le queda otra solución que derribar el alminar construido por el emir Hixén I y el muro norte que lo cerraba. Y se supone que en ese muro norte, el de más extensión de los tres que cercaban el patio, también habría puertas que permitieran la entrada.
Y cuando se realizan excavaciones por Félix Hernández en los años 30 del pasado siglo a esa altura del alminar de Hixén se encuentran los cimientos del mismo exactamente a 10´78 metros al sur de la torre actual, y que están señalizados en el suelo con granito gris. Pero no del muro y las posibles puertas, lo que entra dentro de lo posible pues la cimentación del alminar sería más profunda y fuerte que la del muro. Vaya, que con las obras de ampliación de Abderramán III desaparecen los restos del muro y sus posibles puertas.
Pero hay un dato importantísimo que nos demuestra la existencia de una puerta, la denominada Puerta del Alminar, y es la documentación histórica.
En el libro Historia de los de los Jueces de Córdoba de Aljoxani (Cairuán y Córdoba 361 H) se recopilan hasta el año 358 H apuntes sobre los cadíes de Córdoba. Hay dos pasajes, el primero del 222 H (837 JC) con respecto a un juicio:
“Después de haber salido Yahya por la Puerta del Alminar de la Mezquita aljama…”
Abderramán II, dírham del 222 H, ceca de Al Andalus
Peso: 2´65 gr; diámetro: 23´9 mm
En otro ocurrido en el 259 H (873 JC) dice el juez Soleiman ben Asuad el Gafequi:
“Cuando sea la hora de los oficios, no los retraséis ni un momento, aunque sepáis que yo esté bajando de la cabalgadura junto a la Puerta del Alminar; no me esperéis; llamad a la oración y rezad”
Muhammad I, dírham del 259 H, ceca de Al Andalus
Peso: 2´6 gr; diámetro: 27´8 mm
Las dos fechas referidas corresponden a dos emires distintos: Abderramán II y Muhammad I. Unos 80 años después es cuando Abderramán III derriba esa puerta.
¿Y donde se localizaría la Puerta del Alminar? Lógicamente junto al alminar y a su Este, es decir, frente a la hoy denominada Puerta de las Palmas y consecuentemente frente a la nave axial. En su tiempo debió ser la puerta más importante de entrada al patio.
La circunferencia roja marca la situación de la Puerta del Alminar
Por último decir que los dos dirhames expuestos, exactamente de los mismos años en que se hace referencia a los cadíes de Córdoba Yahya y Al Gafequi, no tienen ninguna novedad en cuanto a los contenidos de las leyendas comparados con otros del emirato. Pero sí en cuanto a las formas.
El primero de ellos presenta una caligrafía poco cuidada, a la vez que un pequeño tallo con dos ramitas en último renglón del anverso. Este detalle ya apareció en los dirhames del año anterior, el 221 H. La información de la que dispongo da exclusividad de ese adorno para el 221 H, pero la realidad del dirham que os presento contradice esa información.
Y con respecto al segundo, del 259 H, en su reverso aparecen unas líneas hendidas que se corresponden con las líneas de escritura del anverso. Ello es debido a problemas en la acuñación y que también se observan en otros años próximos.